Este café nos encanta por su dulzor alto y jugoso, que recuerda a una nectarina madura, combinado con una acidez vibrante y limpia que lo hace muy expresivo. Las notas de grosella y flor blanca aportan frescura, mientras que en espresso destaca un fondo delicioso de cacao nibs.
El varietal Bourbon Sidra, muy aromático, da como resultado una taza compleja, dulce y redonda, ideal para quienes buscan intensidad sin perder elegancia.
Historia
Este microlote proviene de la Finca San Gabriel, ubicada en Palestina, Huila, a 1.710 msnm. Se trata de una finca de tercera generación con más de 50 años de historia cafetera. Sin embargo, el gran cambio llegó hace unos 10 años, cuando la familia Rodríguez decidió romper con las variedades tradicionales de la zona y comenzar a cultivar variedades especiales, con la ambición de participar en la Taza de la Excelencia.
Desde hace 7 años, son participantes activos del concurso, y en 2021 lograron el segundo puesto con uno de sus cafés, un reconocimiento que habla de su compromiso con la calidad. Hoy, el trabajo de Linarco Rodríguez representa una nueva generación de productores que combinan conocimiento heredado con innovación y una apuesta clara por la excelencia.
Este Bourbon Sidra natural es testimonio de ello: una combinación entre terroir, técnica y visión que se traduce en una taza memorable.
Varietal
El Bourbon Sidra es un varietal híbrido y poco común que ha ganado notoriedad por su perfil sensorial complejo y aromático. Aunque su origen no está completamente documentado, se cree que es el resultado de una hibridación natural entre Bourbon Rojo y Typica, o entre Bourbon y Ethiopian Heirloom, dependiendo de la línea genética específica. Este cruce ha dado lugar a una planta que no solo es atractiva por su estructura y vigor, sino sobre todo por su potencial en taza.
En términos sensoriales, el Sidra suele destacar por su elegancia floral, acidez brillante y una dulzura delicada, lo que lo ha convertido en favorito en competencias como la Taza de la Excelencia y entre tostadores de especialidad. Cuando se cultiva a altitudes elevadas y se acompaña de procesos cuidadosos como el natural o lavado largo, ofrece tazas con notas de frutas tropicales, cítricos dulces, florales y una textura muy definida.
Aunque es un varietal más exigente en términos de manejo agrícola y susceptible a ciertas enfermedades, su rendimiento en taza compensa ampliamente esos retos. Por eso, su cultivo sigue siendo una apuesta de productores comprometidos con la calidad, como Linarco Rodríguez en Palestina, Huila, que buscan diferenciarse a través de cafés únicos, expresivos y memorables.
