Kenia - Tatu Estate

NOTAS DE CATA

Mantequilla, licor de moras, miel

POR QUÉ NOS GUSTA 

Nos gusta porque es un café que combina intensidad y equilibrio de forma natural. Desde el primer sorbo se percibe su dulzor cremoso, con una textura untuosa que recuerda a la mantequilla. Las notas de miel aportan calidez, y el punto de licor de moras le da una acidez jugosa y un final largo, con carácter. Es un café completo, goloso, con mucha definición en boca y muy fácil de disfrutar día a día.

HISTORIA

En el corazón del condado de Kiambu, a las afueras de Nairobi, se encuentra Tatu Estate, una finca con décadas de tradición cafetera que forma parte del legado agrícola de Kenia. Fundada bajo la gestión de Kofinaf Company Ltd, uno de los referentes históricos en la producción privada de café del país, Tatu Estate representa un modelo de finca a gran escala que ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin perder sus raíces.

A lo largo de los años, esta finca ha consolidado una reputación sólida gracias a su enfoque integral: no solo se cultiva café, sino que se cultiva una manera de hacer las cosas. La gestión de Tatu Estate incorpora prácticas sostenibles, programas de conservación medioambiental y políticas activas para el bienestar de sus trabajadores. Todo esto se traduce en un equilibrio que va más allá del café y habla de comunidad, de tierra, de compromiso.

Hoy, Tatu Estate sigue siendo un pilar clave en la caficultura keniana moderna. Su historia es la de una finca que combina escala y excelencia, tradición y futuro, en una de las zonas más reconocidas del país para el cultivo de café de alta calidad.

VARIEDAD Y PROCESO

Este lote proviene de plantas de SL28 y SL34, dos variedades desarrolladas en Kenia a mediados del siglo XX, célebres por su capacidad para ofrecer perfiles complejos, dulces y de gran intensidad aromática. Estas variedades se han convertido en sinónimo de excelencia en taza y forman parte fundamental de la identidad cafetera del país.

En esta ocasión, las cerezas fueron sometidas a un proceso natural, poco habitual en el contexto keniano, donde históricamente predominan los métodos lavados. Tras la recolección manual en su punto óptimo de maduración, las cerezas se secaron lentamente al sol sobre camas africanas, bajo un estricto control de temperatura, ventilación e higiene.

Este enfoque permite desarrollar una taza de gran riqueza sensorial, donde la dulzura y la fruta se expresan con una intensidad inusual para esta procedencia, manteniendo al mismo tiempo una acidez vibrante y una limpieza sobresaliente.

RECETA

Para filtro: 

Utilizamos 18 gramos de café molido y 306 gramos de agua final a 93 ºC. Hacemos tres vertidos. El primero de 54 gramos, esperamos 45 segundos y realizamos dos vertidos de 126 gramos en un tiempo total de 2’35”

Para espresso:

Utiliza 17 gramos de dosis para extraer 50 gramos de bebida final en taza en un tiempo de 27”